Beneficios de la fruta de hueso: el melocotón
Las frutas de hueso son uno de nuestros grandes aliados en la época de verano. Su frescura, sabor y poder saciante hacen que no podamos dejar de comerlas durante su temporada y es que, ¿quién puede decir no a un melocotón fresquito con este calor?
Hoy queremos que conozcas todos los beneficios que conlleva el consumo de esta fruta así como nuevas formas de tomarla.
Todos los beneficios del melocotón
Melocotones, albaricoques, paraguayos, nectarinas, ciruelas… la fruta de hueso ofrece mil posibilidades y el rey por excelencia es el melocotón, ¿sabes cuáles son sus beneficios?
El melocotonero llegó a Europa procedente de China, donde se creía que era un emblema del árbol de la vida y sus frutos un símbolo de longevidad.
Dos piezas de melocotón cubren el 50% de la necesidad diaria de vitamina C que requiere nuestro cuerpo. También es un buen diurético ya que aporta potasio, fósforo, magnesio y hierro, por lo que es aconsejable en casos de hipertensión arterial. Su contenido en fibra ayuda a mantener bajos los niveles de colesterol.
El 87% del peso del melocotón es agua, esto unido a su bajo contenido en grasa, hacen de esta fruta un alimento ideal para llevar una dieta equilibrada.
Seguro que no sabías que el melocotón evita la formación de cataratas, debido a la presencia de carotenos y luteína, que favorecen la salud ocular.
Melocotón en almíbar saludable
Si eres un amante del melocotón en almíbar pero no quieres abusar por su alto contenido en azúcar, aquí tienes una receta para poder disfrutar de todo su sabor sin remordimiento. Necesitarás:
- 1 kg de melocotones en su punto óptimo de maduración
- 1 rama de canela
- 500 ml de agua
- 100 g de miel
- Zumo de 1 limón
Tras esterilizar los tarros, lo primero que debes hacer es pelar los melocotones y partirlos. Ahora introduce los trozos de melocotón en el tarro de manera que los trozos más grandes y bonitos queden hacia afuera. Añade la rama de canela y vierte el zumo de limón. En otro recipiente añade el agua hervida y la miel y remueve hasta que quede una mezcla homogénea. Vierte la mezcla sobre los melocotones de manera que queden totalmente cubiertos. Ya puedes cerrar los tarros y llevar a cabo el proceso de vacío.
Para realizar el proceso de vacío necesitarás colocar los tarros en una olla grande totalmente cubierta de agua y hervir durante 40 minutos. Deja que se enfríen y ya lo tienes.
Ya sabes, si todavía no eres un amante de la fruta de hueso, te sobran razones para comenzar a consumirla.